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Un grupo de jóvenes del Hogar de Convivencia en Grupo Educativo de Toledo participa en un taller de sensibilización sobre la trata de personas

El pasado 7 de noviembre, cuatro menores del Hogar de Convivencia en Grupo Educativo de Toledo, dependiente de la Consejería de Bienestar Social del Gobierno de Castilla-La Mancha y gestionado por Fundación Diagrama, participaron en un taller de sensibilización sobre la prostitución y la trata de personas con fines de explotación sexual coordinado por una técnica de Médicos del Mundo. La iniciativa forma parte de las actuaciones complementarias que se realizan dentro del Programa de Prevención de Explotación Sexual en Adolescentes del Sistema de Justicia Juvenil que se está desarrollando en el recurso, y cuenta con la colaboración del Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha.

El taller, de dos horas de duración, tenía como objetivo que las personas jóvenes conocieran la realidad que sufren las mujeres en situación de prostitución y víctimas de trata, concienciándoles sobre la necesidad de abolir esta forma de violencia de género. Para ello se trabajaron en primer lugar diversos conceptos y definiciones: prostitución, trata, prostituidor, violencia de género, derechos, enfermedades de transmisión sexual, etc. Se habló también de los mitos en torno a este tema y de los factores que intervienen. Además, se pudo escuchar el testimonio personal de una mujer superviviente de trata, en el que abordaba las causas que la llevaron a ello, cómo se sentía, pensaba y actuaba y cómo logró escapar, así como las secuelas que le generó y su posterior recuperación.

Durante el taller se fue generando debate con los chicos y chicas sobre los diferentes aspectos tratados, escuchando sus vivencias personales o cercanas relacionadas con esta realidad, y respondiendo a las dudas y comentarios que iban ofreciendo. La actividad concluyó con la pregunta de qué puede hacer cada persona ante esta situación de injusticia social, buscando generar empatía con las víctimas y conciencia crítica frente al machismo, el abuso y la cultura del ‘todo vale’.

Al no ser un grupo grande, las chicas y chicos han podido participar más y aportar diferentes ideas, lo que les ha resultado especialmente motivador e interesante, y les ha ayudado a comprender e interiorizar más los contenidos del taller.